De oca en oca

No contenta con mi pasada enfermedad de úlcera córneal ahora hay que añadir rotura de tímpano. Sí, estoy echa una mierda.

Todo empezó con un inocente dolor de garganta el martes pasado, afianzada en mi salud y robustez de roble no tome ninguna medida paliativa, consecuentemente el miércoles tenía fiebre por la mañana 38,5 º. Por la tarde, las amigdalas se habían cubierto de pus, fui al médico y luego a la farmacia donde me tuve que gastar 14,56 € en mis antibióticos (para mi, que la farmacéutica había untado al médico).

En fin, que me dió justificante para tres días, así tenía el finde resuelto porque sería miércoles, jueves y viernes sin ir al curro, pero yo, voluntariosa y hormiguita, decidí el viernes ir a trabajar (con la esperanza que me dieran la tarde libre, pero de eso nada hasta las 19:00 h como siempre). El sábado acudí a mis clases de inglés por la mañana.

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Claro por aquéllo de estar en la civilización no en mi casa, viernes y sábado no puede expulsar cuantos gaparros hubieran sido necesarios. Ese fue mi error, ya que durante todo el domingo un dolor de oídos, zumbido y mala sintonización en mi oído izquierdo, hasta que por la noche me reventó el tímpano. Cuando por la mañana me levanté a las 7:00 tenía la almohada y la oreja con goterones de sangre, así acompañada por MyMan al hospital, de nuevo a la farmacia y a soltar pasta, 46,83 €.

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Estoy pensando seriamente dejar el curro, ya que con mi exiguo sueldo a este paso no me va a dar ni para pagar mis múltiples medicinas, y en el curro se me emperoran los síntomas.

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Bueno, aquí acaba mi triste relato, acepto consejos para tratar de mejorar mi maltrecha salud. MyMan me recomienda ir al Profesor Emmaús, un curandero africano que con la magia remedia todos los males y si quieres hasta te adivina el futuro, quizá tenga que probarlo....

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